EL PRIMER ABECEDARIO DE LOS NIÑOS ESTA FORMADO POR LAS LETRAS QUE CONFORMAN SU NOMBRE.
Dentro de los textos enumerativos, el nombre propio es le primer texto que un niño desea reconocer -leer- y quiere escribir. También se interesa por el nombre de sus padres y hermanos, de sus compañeros y maestros, de sus mascotas, de sus juguetes y objetos preferidos, etc.
Posibilita que el niño tenga un recurso estable de escritura para interactuar libremente con ella.
Es un buen modelo de escritura porque representa un atributo que sólo puede representarse gráficamente a través de la escritura, siendo una parte muy importante de su identidad, lo que produce gran motivación para aprender -carga afectiva-.